El cebo, en esta ocasión cangrejos y rosca, los cangrejos unos auténticos buscadores de doradas y en esta salida se tradujo en forma de sargos de buen porte, uno de ellos en el lomo con una herida de guerra anterior, lo que parece un mordisco de otro depredador. Con la rosca entraron las herreras imposibles de devolver al agua por venir muy muy embuchadas, una pena porque no eran de las buenas.

Las gametas, como el día, malas, del decartón, un 35 que luego subi a un 40 mm porque las algas y la corriente así lo marcaron.
Como anécdota, las fotos de la mujer bañándose justo delante de mis cañas en un día que no se merecía un baño por el riesgo que conlleva.
Nada más señores, espero que en las próximas salidas os pueda deleitar con grandes piezas, un saludo a todos desde tu blog de Surfcasting, buen lance.